Si sustancias, pequeñas partículas o biocatalizadores y células intactas se unen a una matriz sólida, este proceso se denomina inmovilización (lat. immobilis = inamovible). Así, por ejemplo, la fijación espacial de bacterias, células o enzimas en partículas de gel, cápsulas o espacios de reacción definidos se denomina inmovilización. La inmovilización juega un papel importante en la dinámica de los nutrientes del suelo. Hace que los nutrientes del suelo estén disponibles en una forma temporalmente fija, como en microorganismos o rocas. Sólo cuando las condiciones cambian, como la muerte de los microorganismos o la erosión de la roca, se liberan o movilizan de nuevo.