La fijación del nitrógeno se conoce generalmente como cualquier conversión del nitrógeno elemental molecular (N2) (químicamente inactivo). Es una parte importante del ciclo del nitrógeno. Además, la fijación del nitrógeno del suelo en la materia orgánica también se denomina fijación del nitrógeno. Este fenómeno, que se produce en una proporción desfavorable de carbono-nitrógeno (relación C/N), puede atribuirse a las necesidades de nitrógeno de los microorganismos degradantes. Si se utiliza un acolchado pobre en nitrógeno, como aserrín, madera o corteza, se puede observar una falta de nitrógeno en las plantas de cultivo. Por lo tanto, puede ser ventajoso hacer compostaje de antemano o añadir un fertilizante de nitrógeno. Con la descomposición de la materia orgánica, el nitrógeno enlazado se libera a largo plazo.